Los estatutos de una comunidad de vecinos son un conjunto de acuerdos que puede modificar lo dispuesto en la ley de propiedad horizontal para una comunidad de propietarios concreta.
También suele llamársele estatutos a la división horizontal de una comunidad de vecinos ya que ambas cosas están recogidas en el mismo texto, que es público y que puede solicitarse en el registro de la propiedad por un coste relativamente reducido. Unos 15€ aproximadamente.
¿Dónde puedo encontrar los estatutos de mi comunidad?
Para que los estatutos de una comunidad de propietarios sean válidos es necesario que estén registrados, por lo que podrás encontrar una copia de estos estatutos en el registro de la propiedad de tu localidad. El acceso a estos estatutos, al igual que la división horizontal de tu comunidad, es de acceso público.
En el registro de la propiedad únicamente te preguntarán (por escrito) para qué quieres estos estatutos, pero el proceso es muy sencillo; únicamente te solicitarán que rellenes un formulario.
Los estatutos de las comunidades de propietarios no pueden solicitarse de forma electrónica como sucede con las notas simples. Será necesario que te desplaces físicamente al registro de la propiedad de tu localidad.
Un apunte sobre las notas simples
Por si no lo sabes, puedes solicitar una nota simple de tu departamento (vivienda, local o plaza de aparcamiento) por internet a través de la página web de los registradores de España, que es registradores.org.
En la nota simple podrás encontrar mucha información relacionada con los estatutos de tu comunidad, como el coeficiente de cada departamento.
¿Qué información de interés puedo encontrar en los estatutos?
En los estatutos de tu comunidad de propietarios puedes encontrar, básicamente, dos tipos de información relevante:
- Normas de obligado cumplimiento como propietario y usuario de la comunidad de vecinos.
- Cuestiones relacionadas con el reparto de gastos de tu comunidad de propietarios.
Estatutos que modifican la forma de repartir gastos
Es muy habitual encontrar estatutos en las comunidades de vecinos que modifican la forma de repartir gastos establecida en la ley de propiedad horizontal.
Si aún no lo sabes, la ley de propiedad horizontal determina que todos los gastos de la comunidad de propietarios deben repartirse por coeficientes.
Estos coeficientes están determinados en la división horizontal y puedes conocer el coeficiente de tu departamento solicitando, por ejemplo, una nota simple; o revisando el documento de compra-venta, ya que debería venir reflejado en él.
¿Qué sucede? Pues que repartir los gastos por coeficientes no siempre es la forma más acertada de repartir gastos.
Un ejemplo sobre reparto de gastos en los estatutos de una comunidad de vecinos.
Pongamos por caso un edificio que tiene un sótano destinado al aparcamiento de vehículos.
Podría suceder que este garaje tenga unos gastos totalmente distintos a los de las viviendas, incluso con un contrato de electricidad, agua y mantenimiento distinto.
Pues en este tipo de casos conviene que los estatutos identifiquen que los gastos del garaje y los gastos del resto del edificio se repartan por separado entre los propietarios del garaje y los propietarios de las viviendas.
También es habitual encontrarse estatutos en los que se indique que algunos gastos de la comunidad se han de repartir a partes iguales.
Estatutos que establecen normas de obligado cumplimiento
En comunidades de propietarios con zonas comunes como piscinas, gimnasios y jardines es muy habitual encontrar estatutos donde se indique, por ejemplo, a qué horas se pueden utilizar.
Un ejemplo sobre este tipo de estatutos sería el del uso de la piscina. Para respetar el descanso de todos los vecinos es habitual indicar que la piscina no se puede utilizar de noche o que existan algunas horas al mediodía donde no esté permitido bañarse.
¿Qué son los estatutos y por qué son tan importantes?
Los estatutos de la comunidad son una serie de normas que se establecen por unanimidad entre todos los vecinos de una comunidad de propietarios y que tienen el rango de ley.
Estos estatutos pueden modificar la forma de repartir los gastos en una comunidad de propietarios.
Es muy habitual que se redacten estatutos que indiquen que los bajos comerciales del edificio estén exentos del pago de una serie de gastos relacionados con el zaguán de la comunidad de vecinos, tales como limpieza de escalera, mantenimiento del ascensor, o gastos de suministro de agua y electricidad.
También es habitual encontrarse con una redacción amplia de estatutos en las comunidades de propietarios grandes, incluso en comunidades de propietarios compuesta de distintos edificios.
En este caso, es habitual que se separen ciertos gastos como propios de cada edificio y se mantengan gastos comunes como podrían ser el mantenimiento de zonas comunes como la piscina, zonas ajardinadas o pistas deportivas.
Resumiendo, los estatutos de una comunidad de vecinos son la herramienta que ofrece la ley de propiedad horizontal para que cada comunidad de propietarios pueda organizarse teniendo en cuenta sus características propias.